Tratamientos para la alopecia androgénica

¿Cuáles son los mejores tratamientos para la alopecia androgénica?

La alopecia androgénica o calvicie hereditaria, afecta a un gran porcentaje de la población masculina, y también a algunas mujeres. Su aparición está relacionada con el efecto de la testosterona en el folículo piloso, reduciendo su tamaño hasta atrofiarlo por completo.

Cuando esto sucede, el pelo se cae y no vuelve a salir más: es un tipo de alopecia definitiva y progresiva. Teniendo esto en cuenta, hay que intentar ser lo más realistas posible con los resultados que se pueden esperar de los diferentes tratamientos para la alopecia hereditaria que existen en el mercado. Veamos una por una cuáles son nuestras opciones:

Tratamientos para la alopecia androgénica: ¿verdad o engaño?

Aunque algunos productos y tratamientos sirven efectivamente para frenar o retrasar la caída del cabello, no hay ningún tratamiento milagroso que pueda recuperar un bulbo piloso atrofiado. Por tanto, todo cuanto hagamos para “curar la calvicie” es en realidad:

  • Una corrección estética del cabello que se ha perdido
  • Un intento de frenar el avance de la alopecia en el cabello que aún mantenemos intacto

Lo más habitual es elegir una combinación de diferentes vías de ataque para combatir este problema. Esto incluye cambios en los hábitos de vida, remedios naturales, productos tópicos, fármacos, tratamientos de estimulación capilar y finalmente el trasplante de cabello.

La alopecia androgénica tratamiento a tratamiento

Empecemos por lo primero y más importante: los hábitos. Mantener una correcta higiene, beber mucha agua, llevar una dieta equilibrada, eliminar o reducir el consumo de alcohol y tabaco, dormir y evitar situaciones estresantes son la base para empezar a lidiar con la caída.

La idea es crear las circunstancias adecuadas para que el pelo que aún mantenemos en la cabeza crezca lo más fuerte posible. Así se potencia desde la base el efecto de los otros tratamientos para la alopecia androgénica incluidos en nuestro plan de acción.

La buena noticia: aunque la alopecia androgénica pueda dar algo de miedo porque se plantea como “ineludible”, marcado en nuestros genes, en realidad es uno de los tipos de calvicie más fáciles de diagnosticar. Y cuenta con mayor número de opciones en cuestión de tratamientos. 

Otros casos más complicados son aquellos con enfermedades subyacentes y difíciles de curar, como la alopecia areata, que va y viene de forma cíclica y está relacionada con una reacción del sistema inmune. 

Veamos qué opciones disponemos en cuestión de tratamientos para la alopecia androgénica.

1. Minoxidil

Se trata de un medicamento tópico vasodilatador que debe aplicarse de manera consistente sobre el cuero cabelludo. Su función es la de promover el crecimiento del pelo existente (no del que ya hemos perdido), estimulando la microcirculación sanguínea y por tanto la llegada de nutrientes y oxígeno al folículo.

2. Finasteride

El finasteride para el pelo es un fármaco en forma de pastilla, que se debe administrar a diario, y que inhibe la producción de DHT, la hormona derivada de la testosterona responsable de atacar el folículo piloso. Sirve exclusivamente para tratar la alopecia androgénica, y se emplea en casos donde la misma es aún incipiente con el fin de conservar el cabello restante lo máximo posible. 

3. Plasma rico en plaquetas

El plasma rico en plaquetas, o tratamiento PRP, promueve la regeneración capilar usando la sangre del propio paciente. Después de extraerla, se centrifuga para separar sus componentes, y se vuelve a inyectar cuero cabelludo. El tratamiento PRP suele recomendarse como complemento a un trasplante capilar porque activa el folículo piloso y promueve la buena calidad del pelo.

4. Mesoterapia

Similar al tratamiento PRP en su aplicación, la mesoterapia capilar consiste en una serie de microinyecciones repartidas por el cuero cabelludo, a lo largo de varias sesiones. En lugar de plasma, en este caso lo que se inyecta es una combinación de micronutrientes, como los que llegan al cabello a través del riego sanguíneo, y también fármacos como la dutasterida

Las limitaciones de este tratamiento para la alopecia androgénica son similares a los anteriores. Su finalidad es la de preservar el cabello y retrasar su caída. Pero en ningún caso estos tratamientos permiten la recuperación de los bulbos pilosos que ya han sido afectados por la hormona DHT.

5. Micropigmentación capilar

Micropigmentación capilar

La micropigmentación es una suerte de tatuaje del cuero cabelludo con un pigmento temporal, aplicado en las zonas donde hace falta mejorar la densidad del cabello. Más que tratar la calvicie (no afecta al crecimiento del pelo, ni retrasa el avance de la alopecia), lo que hace la micropigmentación capilar es disimular. 

La micropigmentación crea un efecto óptico que puede resultar muy útil para rellenar áreas con poco pelo, con alopecia difusa, o después de un trasplante con pocos injertos. En algunos casos, también puede aplicarse de manera más extensa simulando un “efecto rapado”. 

Tratamientos para la alopecia androgénica: ¿hay solución definitiva?

En los casos en los que la alopecia ha avanzado lo suficiente como para no reaccionar a ninguno de los tratamientos anteriores, el trasplante capilar FUE se posiciona como la solución definitiva a la pérdida de cabello.

El injerto capilar es una intervención quirúrgica, que toma folículos sanos de las zonas de la cabeza menos afectadas por la DHT, y los implanta cuidadosamente en las zonas despobladas. 

Los injertos son permanentes y los resultados suelen ser excelentes. Si padece de problemas de alopecia androgénica y ha comenzado a preocuparse por su evolución, puede consultar hoy mismo con nuestro equipo. Resolverán cualquiera duda sobre cuáles son sus opciones de tratamiento para la alopecia androgénica, o la viabilidad de un trasplante capilar.