¿Qué es y cuánto dura el efecto shedding?
Después de comenzar un tratamiento capilar, muchas personas ven que en la primera etapa pierden mucho más pelo que antes. Esta pérdida de cabello es conocida como efecto shedding y se trata del periodo de transición capilar que atraviesa el folículo piloso desde la fase de crecimiento hasta la fase de reposo. A pesar de ser normal y previsible, muchos pacientes se asustan al ver que el cabello no solo no crece, sino que la caída de pelo aumenta. A continuación, te explicamos con más detalle qué es el efecto shedding y cuánto dura.
Índice
Causas de esta caída del pelo temporal
El efecto shedding es una caída de cabello o efluvio telógeno relacionado con un tratamiento para frenar la caída del cabello. Generalmente, el efecto shedding afecta a hombres y mujeres que comienzan a utilizar minoxidil, finasterida u otros fármacos que estimulan el crecimiento capilar.
Aunque no se dé en todos los casos, una vez comienza resulta imposible evitar o frenar el efecto shedding. Durante este período, el cabello necesita un tiempo para acostumbrarse al tratamiento y es posible que la pérdida aumente. Sin embargo, no hay que preocuparse. El pelo volverá a crecer.
¿Cuánto dura el efecto shedding?
La duración del shedding depende de la causa y de cada paciente en particular. Aunque puede durar un mes, lo más habitual es que se prolongue entre uno y tres meses. Algunos pacientes abandonan sus tratamientos capilares pensando, erróneamente, que su cuero cabelludo no responde al medicamento.
Lo más común es que el efecto shedding sea temporal y que el tratamiento ayude a la recuperación del cabello. A pesar de todo, se debe tener en cuenta que, si el efluvio telógeno se prolonga más de tres o cuatro meses, pueden existir otros factores que imposibiliten el adecuado desarrollo del tratamiento. Normalmente, se observan efectos positivos en la densidad capilar cuatro o seis meses después de haber comenzado el tratamiento.
Pérdida del cabello tras un trasplante capilar
El efluvio telógeno también aparece tras un trasplante capilar. La caída temporal del cabello tras el injerto capilar puede estar relacionada con la disminución del riego sanguíneo a los folículos pilosos, el traumatismo directo de los folículos pilosos durante la disección, el estrés fisiológico de la propia operación y el estrés emocional excesivo antes del trasplante capilar.
Durante un trasplante capilar FUE, las unidades foliculares se implantan siguiendo un proceso minucioso, que supone extraer los folículos e injertarlos individualmente en el cuero cabelludo. Pasadas las primeras semanas, cada uno de estos folículos entra en una fase de reposo durante la cual es habitual que el cabello injertado se caiga.
Esta caída, por muy chocante que sea, no afecta a la capacidad del folículo trasplantado de producir cabello nuevo. Como sucede con el efecto shedding post-minoxidil, la caída temporal del cabello trasplantado indica que el folículo producirá cabello de mejor calidad en el futuro.
Diferencias entre efecto shedding y shock loss
La administración de anestesia local en la zona donante y receptora puede crear una reacción adversa en el organismo. Este estrés físico puede provocar una pérdida de cabello al suspender el proceso de división celular en los folículos pilosos, provocar la liberación de cortisol o desviar el suministro de nutrientes a los folículos pilosos.
En algunos casos, el paciente puede padecer un efluvio telógeno, también conocido como shock loss, que afecte a los folículos no trasplantados. Esta caída de cabello puede influir en el resultado final del implante capilar, ya que, en casos extremos, los folículos pueden llegar a caerse de forma permanente. También puede ser que la zona donante no vuelva a crecer correctamente.
A diferencia del shock loss, el efecto shedding se produce cuando los folículos trasplantados se caen de la zona receptora. Suele ocurrir cuando el pelo trasplantado entra en una nueva fase anágena, lo que significa que el cuerpo no ha rechazado el pelo y que está listo para crecer de nuevo. Después de 3-4 meses, el pelo vuelve a crecer.
Resumiendo, el efecto shedding es la pérdida de los injertos trasplantados y es temporal. El shock loss, por el contrario, es la pérdida del cabello que rodea el área trasplantada y puede ser temporal o, muy raramente, permanente.
Preguntas frecuentes
¿El efecto shedding afecta a todos los tipos de tratamientos capilares?
El efecto shedding es más común con tratamientos como el minoxidil y la finasterida, pero puede ocurrir con otros tratamientos que estimulan el crecimiento del cabello. Es importante consultar con un especialista para entender las expectativas de cada tratamiento.
¿Cómo se diferencia el efecto shedding de otros tipos de caída de cabello no relacionados con tratamientos?
El efecto shedding está directamente relacionado con el inicio de un tratamiento capilar y suele ser temporal. Otras caídas de cabello pueden deberse a factores como estrés, deficiencias nutricionales o condiciones médicas, y requieren un diagnóstico adecuado para su tratamiento.
¿Qué impacto tiene el efecto shedding en los resultados finales del tratamiento capilar?
Aunque puede ser alarmante, el efecto shedding es generalmente una señal de que el tratamiento está funcionando. A largo plazo, los folículos capilares se fortalecen y producen cabello más saludable y denso.