Cómo ocultar o disimular una cicatriz en la cabeza
Generalmente, con el cabello propio se puede ocultar o disimular una cicatriz en la cabeza. No obstante, algunas heridas producidas por accidentes, quemaduras o trasplantes de cabello hechos con técnicas anticuadas o con poca profesionalidad, pueden dejar cicatrices muy llamativas que son difíciles de ocultar con un peinado.
Esto hace que muchos afectados tengan una autoestima baja y eviten salir a la calle sin cubrirse la cabeza con un sombrero o una gorra. Sin embargo, pese a que el folículo piloso ha sido destruido y el pelo no puede crecer en el tejido cicatricial, los injertos capilares pueden reconstruir el cabello en algunos casos. Veamos, a continuación, en qué casos es posible someterse a un trasplante para disimular una cicatriz en la cabeza.
Índice
- ¿Se puede hacer un injerto capilar en una cicatriz?
- Tipos y características de las cicatrices más comunes
- ¿Qué heridas producen cicatrices en el cuero cabelludo?
- Métodos para ocultar cicatrices antiestéticas
¿Se puede hacer un injerto capilar en una cicatriz?
La gran mayoría de pacientes que recurre a una clínica capilar está aquejada de algún grado de alopecia androgénica. Sin embargo, no siempre es así. En algunas ocasiones, la persona desea hacerse un injerto capilar para disimular o tapar una cicatriz en la cabeza.
Este tejido dañado puede hacer que muchas personas afectadas no puedan hacer una vida normal y padezcan ansiedad y depresión. En estos casos, la primera solución que buscan muchas personas es dejarse crecer el cabello hasta que tenga una longitud suficiente para cubrir la cicatriz. Dependiendo de dónde esté localizada y su tamaño, la marca puede limitar las opciones que tiene el afectado para peinarse o cortarse el pelo.
Aunque el pelo no crece en el tejido cicatricial, es posible cubrir las cicatrices mediante la implantación de folículos pilosos sanos provenientes de una zona donante. Para ello es necesario analizar el tejido y ver si el diagnóstico es positivo y se pueda garantizar que el trasplante ofrece un buen resultado. Puede que sea necesario eliminar un exceso de tejido cicatricial de antemano o usar procedimientos complementarios.
Tipos y características de las cicatrices más comunes
Existen diferentes tipos de cicatrices que presentan distintos desafíos desde el punto de vista de la restauración capilar, porque su origen es diferente. El objetivo de la cirugía es conseguir un aspecto natural y utilizar la técnica más efectiva para lograr resultados satisfactorios. Las cicatrices que podemos encontrar difieren en las siguientes características:
- Hiperpigmentadas: presentan un color más oscuro que la piel circundante debido a la melanogénesis durante el proceso de curación.
- Hipopigmentadas: son más claras que el resto de la piel circundante.
- Atróficas: se sitúan por debajo de la superficie de la piel. circundante, como por ejemplo las cicatrices a causa del acné.
- Hipertróficas: son una lesión fibrosa, eritematosa, levantada y prurítica que se forma dentro de los bordes iniciales de una herida.
- Queloides: son cicatrices gruesas, elevadas, irregulares y con un tamaño que varía según la dimensión de la lesión original y el momento en que el queloide deja de crecer.
En los casos que sea necesario un injerto capilar, la cicatriz puede tratarse previamente para reducir el volumen del tejido cicatricial. Normalmente se suele utilizar tanto cirugías de corrección como técnicas láser que permiten reducir su apariencia, eliminar la piel dañada en la superficie de la cicatriz y estimular la producción de colágeno.
¿Qué heridas producen cicatrices en el cuero cabelludo?
Las cicatrices se forman durante el proceso de curación de una herida causada por un corte, un rasguño, una quemadura o una llaga. Las cirugías, las enfermedades como la varicela y los trastornos de la piel como el acné también pueden producir cicatrices. El cuero cabelludo puede presentar:
Cicatrices causadas por accidentes
Los pacientes que presentan cicatrices en la cabeza, barba o cejas a causa de un accidente son muy frecuentes. A menudo se trata de marcas de pequeño tamaño, exceptuando los casos en que se requiera de una cirugía mayor para solventar un problema más grave como, por ejemplo, después de un accidente de coche. A menudo se pueden realizar trasplantes de cabello con resultados positivos en este tipo de marcas, sin requerir de una reconstrucción previa del tejido cicatricial.
Cicatrices congénitas
Algunas personas pueden nacer con cicatrices congénitas, también llamadas aplasia cutánea congénita. Se trata de una dermatosis muy poco frecuente que se caracteriza por la ausencia de pelo al nacer en un área concreta del cuerpo, normalmente el vértex o zona superior de la cabeza. Para determinar qué correcciones son posibles, es fundamental una consulta previa con el especialista para investigar el área y barajar los motivos y soluciones.
Cicatrices producidas por procesos inflamatorios
Entran en esta categoría los diversos tipos de alopecia cicatricial como, por ejemplo, la alopecia frontal fibrosante. Este tipo de calvicie está relacionada con procesos autoinmunes. Cuando esto sucede, el folículo piloso se destruye completamente y es sustituido por tejido cicatricial, por lo que es un tipo de alopecia difícil de controlar. Este tipo de tejido solo es viable para un trasplante cuando la enfermedad subyacente ha sido totalmente controlada.
Cicatrices por cirugías
En esta categoría suelen entrar cicatrices más visibles y extensas. Las más comunes suelen estar relacionadas con neurocirugías y cirugías estéticas como el lifting facial.
Cicatrices por un trasplante capilar FUSS
Con la técnica FUSS o FUT, las unidades foliculares no se extraen una a una del área donante, sino que se secciona una tira de piel completa del cuero cabelludo de entre 15 y 20 cm de largo. Este tipo de injerto capilar, por tanto, deja una cicatriz visible en la parte posterior de la cabeza, que, dependiendo de la destreza del cirujano y del proceso de curación, puede resultar más o menos evidente.
Métodos para ocultar cicatrices capilares antiestéticas
Hay diferentes formas con las que se pueden disimular las cicatrices en la cabeza. Se puede intentar fomentar el crecimiento del cabello en el área usando fármacos como el minoxidil u otros tratamientos capilares como las infiltraciones de plasma enriquecido o PRP.
Sin embargo, este tipo de tratamientos solo hacen efecto en los folículos pilosos sanos, donde aún es posible que crezca el cabello. En los casos en los que el folículo piloso ha sido dañado o ha desaparecido a causa del tejido cicatricial, es imposible regenerarlo. Para esos casos existen otras alternativas como los tratamientos de:
Micropigmentación
La micropigmentación capilar permite ocultar visualmente la cicatriz implantando pigmentos naturales en la dermis. Este método simula la apariencia del pelo rasurado en fase de crecimiento y da la impresión de una mayor densidad capilar, por lo que permite cubrir o disimular una cicatriz en la cabeza.
Al contrario que un tatuaje, tiene una duración determinada, por lo que es necesario volver a aplicar el pigmento cada cierto tiempo. Además, en ocasiones son necesarias varias sesiones para completar este tipo de tatuaje médico, dependiendo del tamaño del área a tratar.
Injerto capilar FUE
Un injerto capilar es un tratamiento ideal para ocultar una cicatriz antiestética. La técnica FUE permite un trasplante con unidades foliculares extraídas individualmente de áreas que aún conserven una buena densidad capilar. Tras un diagnóstico previo, el especialista será capaz de delimitar las áreas donantes con mejor calidad capilar para reubicar esos folículos en la zona afectada.
Con la técnica FUE es posible la corrección de un implante capilar FUSS realizado con anterioridad, aunque esté mal ejecutado. También puede llevarse a cabo en otras áreas del rostro afectadas por una cicatriz, como la barba o las cejas.
Los trasplantes de pelo pueden cubrir el tejido cicatricial tanto en marcas pequeñas como en cicatrices grandes y visibles. En determinados casos, será necesario eliminar la cicatriz previamente con cirugía o terapia láser, antes de restituir los folículos destruidos por otros nuevos con un trasplante capilar.
Preguntas frecuentes
¿Qué tipos de cicatrices pueden tratarse con un injerto capilar?
Cicatrices de quemaduras, cirugías, accidentes o procedimientos previos de trasplante capilar pueden ser tratadas con injertos capilares.
¿El injerto capilar es efectivo para ocultar cicatrices en todas las zonas del cuero cabelludo?
La efectividad puede variar según la zona del cuero cabelludo y la severidad de la cicatriz, aunque generalmente es efectivo en la mayoría de las áreas.
¿Cómo se determina si una cicatriz es apta para un injerto capilar?
Además de la consulta con el especialista y la evaluación de la cicatriz, es necesario realizar un análisis de la zona donante para asegurar la viabilidad del procedimiento.